En un discurso de Mussolini del 3 de mayo de 1921 se puede leer lo siguiente:
"Se habla mucho de la actividad violenta de los fascistas. Nos arrogamos para nosotros el derecho de controlarla y, si el caso llega, de elmininarla. Que cese primeramente la campaña de descrédito y odio que se ha desencadenado contra nosotros y, luego, depondremos nuestras armas. Entretanto y mientras lo consideremos necesario, seguiremos golpeando con mayor o menor intensidad los cráneos de nuestros enemigos, es decir, hasta que la verdad haya penetrado en ellos."
De este texto se desprenden las siguientes cuestiones, a nuestro entender:
1. La violencia está justificada porque se tienen muchos enemigos. Se pretende demostrar que la violencia es en legítima defensa.
2. Solamente desapacería la violencia propia cuando cesase la campaña de descrédito que sufriría el fascismo.
3. El control o cese de la violencia es potestad del fascismo: "y mientras lo consideremos necesario"
4. La verdad no se alcanza con el debate razonado y democrático sino golpeando los cráneos para que penetre en ellos. Es el fracaso de la diálogo. Además se explicita que la verdad reside en el movimiento fascista.
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